SUSCRÍBETE A NUESTRO CANAL DE YOUTUBE
ÉCHALE UN VISTAZO AL VÍDEO
¡¡ TE ESPERAMOS !!
Sevilla está «totalmente dentro de los límites legales y aceptados por la Unión Europea» en materia de calidad del aire. Así lo asegura la directora general de Economía y Comercio del Ayuntamiento hispalense, Esperanza Caro, que es responsable del Plan de Calidad del Aire en el área metropolitana. Es más, «los análisis de 2016 mejoran incluso los datos que se registraron el año anterior», incide.
Caro descarta en cualquier caso que, con los niveles que se registran en el área metropolitana, se pueda dar actualmente una situación mínimamente cercana a la que se vive estos días en Madrid, donde se ha llegado a limitar el tráfico rodado en la ciudad según el número de matrícula. «A día de hoy estamos lejos de ese escenario», especifica. «El tráfico es el mayor problema de las ciudades en materia de contaminación atmosférica y Madrid tiene un volumen de coches muy superior a Sevilla».
Tráfico, condiciones meteorológicas y orografía son los tres elementos que combinados pueden dar como resultado contaminación. En la provincia de Sevilla, señala Caro, los niveles más preocupantes son los de ozono troposférico (O3) cuando llega el verano, «aunque en ningún caso los picos alcanzados han superado este año los límites establecidos».
Caro asegura que cuando se han alcanzado determinados valores «se avisa a la población mediante los paneles informativos que hay repartidos en la ciudad» con la intención de que los grupos de riesgo como las personas mayores o los niños eviten salir a la calle o no se practique deporte al aire libre. «Pero este año ni siquiera hemos llegado a tener que advertir de esto y mucho menos nos hemos acercado al nivel de alerta» en el que ya las administraciones autonómica y local deben poner en marcha medidas para paliarlo. «Ha habido picos, pero siempre dentro de lo permitido, nunca hemos registrado un problema», insiste. Caro explica que 2007 y 2008 fueron años «complicados» en los que la calidad del aire sí que estuvo «comprometida», «pero desde entonces nos mantenemos estables y mejoramos año a año».
Desde el año 2013 Sevilla cuenta con el Plan de Calidad del Aire. Gracias a él se realizan mediciones diarias en estaciones en las siete cabinas localizadas en diferentes puntos de la ciudad pertenecientes a la Red de Vigilancia y Control de la Calidad del Aire que «recogen datos constantemente». Para mejorar la situación en esta materia, el Ayuntamiento acaba de licitar un servicio de asistencia técnica para la evaluación del plan con la idea de saber «en qué situación nos encontramos, identificar las causas que generan los problemas, valorar si las medidas que adoptamos funcionan y si hay otras que se puedan poner en marcha para seguir reduciendo los niveles de contaminación».
¿Qué puede hacer la población para mejorar esta situación? La directora general de Economía y Comercio del Ayuntamiento hispalense es clara: la movilidad. Apostar por el transporte público y las peatonalizaciones para reducir el tráfico en la ciudad.
Ante la actuación de oficio iniciada por la Defensora del Pueblo, cargo que desempeña la exalcaldesa sevillana Soledad Becerril, para conocer las medidas que contemplan para atajar la contaminación atmosférica urbana en 14 municipios españoles, entre los que figura Sevilla, Caro asegura que el Ayuntamiento está «tranquilo pues el trabajo que desempeñamos es el correcto y la ciudad no tiene niveles problemáticos». «Facilitaremos todos los datos que nos pida».
La contaminación atmosférica es uno de los grandes problemas ambientales en los ámbitos mundial, europeo y local. En 2016 varias localidades españolas superaron los niveles aconsejados de contaminación por partículas en suspensión, según las últimas estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre contaminación atmosférica urbana. El pasado año, el informe La calidad del aire en el Estado español durante 2015 elaborado por Ecologistas en Acción, señalaba el área metropolitana de Sevilla –junto a las de Córdoba, Granada y Málaga y las zonas industriales de Huelva, la Bahía de Algeciras y Carboneras– como uno de los principales focos de contaminación en Andalucía.
Boinas sobre Sevilla
En alguna que otra ocasión la ciudad se ha levantado con una nube negra que ha hecho saltar todas las alarmas. Caro explica que hay dos motivos que las explican. El primero es la inversión térmica. «A primera hora de la mañana, el frío no deja pasar las partículas a la atmósfera. En cuanto sale el sol, la boina desaparece». En el segundo de los casos, son las invasiones de aire subsahariano las que hacen que se concentren partículas. Pero son naturales y por lo tanto no se consideran dentro de los agentes contaminantes».
FUENTE: EL CORREO DE ANDALUCIA