Si nos
damos un paseo por la Calle
Sierpes, y accedemos a ella desde la Plaza de La Campana,llegamos
rápidamente hasta el “Cronómetro”.
Justo al lado, podemos contemplar
este azulejo, que hace mención a la existencia en otro momento de la historia,
de un jardín
botánico en este lugar.
Estamos hablando del que
perteneció al médico sevillano Nicolás
Monardes. En él conoció, estudió, investigó y llegó a
cultivar productos que eran absolutamente desconocidos en Europa. Como por
ejemplo, la piña, el cacahuete, el maíz o la batata. Además, en este jardín,
tuvo la oportunidad de estudiar un producto de una elevada importancia para
Sevilla, como fue el tabaco.